Tarjetas revolving: ¿Cómo salir de la espiral de endeudamiento?

El número de afectados por estas tarjetas ya supera el de los afectados por las cláusulas suelo y no se prevé un final a corto plazo. La mayoría de las reclamaciones que se realizan por estos créditos terminan con sentencias favorables al consumidor por considerarlos intereses usurarios.

Hablamos con José Baltasar Plaza Frías, abogado CEO de Bufete Rosales, despacho especializado en reclamaciones bancarias con más de 30 años de experiencia y que realizan numerosas reclamaciones de este tipo de productos bancarios. Nos explica el funcionamiento de este tipo de créditos y el procedimiento para reclamarlos y recuperar los intereses y comisiones pagados de más.

¿Qué es una tarjeta revolving y cómo funciona?

Una tarjeta revolving es un crédito que un banco o una entidad financiera otorga a un consumidor que se materializa en una tarjeta al uso y que permite a su titular realizar compras o sacar dinero en efectivo de un cajero aplazando su pago. El cliente puede elegir el plazo de devolución y el importe de las cuotas de amortización a cambio de un interés. A medida que el cliente va pagando sus cuotas y amortizando la deuda, va recuperando la línea de crédito. ¿Qué pasa? Que si las cuotas son pequeñas y no cubren el principal de la deuda, generan nuevos intereses y convierten la deuda en perpetua. Con unos intereses abusivos y usurarios, notablemente superiores al normal del dinero y manifiestamente desproporcionados, lo que supone un mayor coste para el consumidor.

¿Qué entidades las comercializan?

Prácticamente todas, siendo las más utilizadas las de WIZINK, CETELEM, CAIXA, BANKINTER, CARREFOUR, BBVA, BANKIA, COFIDIS, BS, UNICAJA…

¿Qué consejo da a un cliente consumidor que tenga una tarjeta de este tipo?

Pues que se pongan en contacto con un despacho especializado en derecho bancario. Nosotros, particularmente, le hacemos un estudio del caso, le solicitamos al banco el contrato y un cuadro de amortización completo y les hacemos un cálculo de los intereses pagados de más para solicitárselo al banco. Primero extrajudicialmente y, si ello no da resultado, iniciar una reclamación judicial. Se sorprendería del enorme importe de los intereses pagados de más que ahora se pueden recuperar.

¿Qué puede pedir un afectado por una tarjeta revolving?

Las consecuencias de que los intereses aplicados a este tipo de tarjetas sean abusivos es la nulidad del contrato y, por tanto, que sean declarados nulos todos los pagos realizados por el consumidor, teniendo en ese caso el banco que devolver lo recibido por el cliente, o también la nulidad de la cláusula de intereses.

¿Están dando la razón los tribunales a los afectados?

A día de hoy, y cada vez con mayor incidencia, tanto  los Juzgados de Primera Instancia como  las Audiencias Provinciales españolas están estimando las demandas de los consumidores y, así, están declarando nulos los intereses remuneratorios aplicados a los contratos de tarjetas de crédito, así como abusivas las comisiones en su caso aplicadas, condenando a las entidades demandadas a la devolución de las cantidades que por esos conceptos excedieran de lo prestado, lógicamente sumado el interés legal del dinero de las cantidades resultantes.

Para que sirva de ejemplo y orientación, decir que tarjetas que devienen de 2005, por ejemplo, están resultando unas devoluciones de entre 10.000 y 20.000 euros. 

¿Qué honorarios cobra Bufete Rosales a sus clientes por llevarles un caso de tarjetas revolving?

Seguimos con la misma política de honorarios que llevamos años aplicando en el área de derecho bancario, que es ir a éxito, a resultado, es decir, no cobramos cuota de entrada ni provisión de fondos, ni por concepto de abogado ni de procurador. Cobramos un 10% de lo que consiga recuperar nuestro cliente, y sólo si lo recupera.

Por estos motivos, recomendamos que los usuarios que posean alguna tarjeta revolving se pongan en contacto con un despacho de abogados especializado en la reclamación de estos productos bancarios y reclamen los intereses y comisiones que han estado pagando de más. Muchos consumidores ya han recuperado su dinero.