Este Plan de Recuperación enlaza de forma perfecta con uno de los objetivos principales de la Unión Europea: el de reducir las emisiones de efecto invernadero en un 55% para 2030, con respecto a los niveles de 1990.
En este objetivo, que nos concierne a todos por el futuro de nuestro planeta, el parque de edificios europeo juega un papel fundamental, puesto que es responsable de un 40% del consumo energético de todo el continente. De su renovación, por tanto, depende la reducción de este tipo de contaminación.
Para conseguirlo, alrededor de un 6% de los fondos europeos se destinarán a la rehabilitación de viviendas, lo que supondrá triplicar la inversión pública que hasta ahora se venía haciendo. Esto significa que más de 500.000 viviendas serán rehabilitadas entre 2021 y 2023, multiplicando el ritmo actual de este tipo de remodelaciones por 6 en tan solo 3 años.