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Transformando la atención a domicilio
Poner a las personas en el centro, equipos cualificados y tecnología de vanguardia son la base de Atende, filial de Clece, para elevar a la excelencia el Servicio de Ayuda a Domicilio.
De la orden ministerial que establecía “asistencia a los ancianos” en la década de los 70 a la promulgación de la Ley 39/2006 de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las Personas en situación de Dependencia, el Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) ha evolucionado para adaptarse al objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas usuarias. Tal y como explica esta última norma, a día de hoy se trata de un derecho que “contempla de manera específica la prevención y la atención a las personas que se encuentran en situación de dependencia, y configura para ellas el derecho a un catálogo de servicios y prestaciones económicas”.
De cómo llevar este propósito a la excelencia sabe mucho Atende, filial de Clece especializada en prestar y promover servicios sociosanitarios. Su modelo se basa en situar en el centro a la persona, teniendo en cuenta su entorno y necesidades cotidianas para potenciar tanto su bienestar físico como social y emocional atendiendo su plan de vida.
Un enfoque
integral diferencial
Cerca de 15.000 auxiliares de Atende entran de forma habitual en más de 96.000 domicilios en todo el territorio nacional: este es el primer dato que arroja Verónica Plata, coordinadora de Servicios Sociales de la Delegación Regional Sur de Atende, para describir el reto que supone cubrir las necesidades de las personas a las que cuidan desde una perspectiva 360o. “Las actividades de la vida diaria son muy amplias: hay que levantarse, asearse, ir al médico, ¡hay que reírse!, hay que comer de forma equilibrada, hay que moverse, hay que tener limpia la casa”, explica.
Todas estas necesidades son las que se atienden a través del Servicio de Ayuda a Domicilio, lo que, según su experiencia y compromiso de excelencia, implica conocer a la persona a través de su historia de vida, trabajar con la familia, saber qué equipamientos hay disponibles en cada caso, cómo se relaciona con su entorno… “Nosotros vamos más allá: analizamos las problemáticas y buscamos los recursos necesarios para cada caso”, señala.
Llevar a cabo esta labor requiere contar con un equipo altamente profesionalizado e implicado, en continua formación, y perfectamente coordinado. Una de sus principales herramientas para hacer que este engranaje funcione es un programa informático de desarrollo propio, ‘Asisto’, que funciona como un ecosistema de cuidados donde participan desde los equipos de trabajo social y las auxiliares a las personas usuarias y sus familias. “Además de organizarnos, nos sirve para recoger un gran volumen de datos que nos permite conocer muy bien las necesidades en cada momento”, añade.
Compromiso social
e investigación
Este amplio conocimiento sobre el terreno sirve en Atende, además, para poner en marcha proyectos que mejoren aún más la asistencia. Según cuenta Plata, es habitual que trabajen junto a organismos para hacer estudios que les permitan elaborar protocolos cada vez más específicos. Como ejemplo, cita una investigación que la empresa llevó a cabo hace un par de años junto a la Universidad de Jaén, para corroborar si, tal y como intuían por su propia experiencia, ser mujer y mayor aumenta las probabilidades de sufrir cualquier tipo de violencia. “Gracias a este estudio pudimos confirmar estos datos y poner en marcha procedimientos especiales para esos casos”, explica.
Actualmente están trabajando con un grupo de investigación de la Universidad Pablo Olavide de Sevilla para estudiar la soledad no deseada en un grupo de personas atendidas por el Servicio de Ayuda a Domicilio en dicha ciudad, ya que supone uno de los mayores desafíos a los que se tienen que enfrentar hoy en día. “Se trata de un proyecto de 18 meses de duración -señala-. En la primera fase veremos cuáles son los indicadores que nos pueden dar la señal de alerta de que una persona está viviendo una situación de este tipo; después tenemos prevista una segunda fase de intervención para diseñar un mapa de recursos y equipamientos específicos”.
Tecnología
y asistencia domiciliaria
Teniendo en cuenta la longevidad progresiva de la población, la tendencia al alza de este tipo de situaciones (en 2023 según el Observatorio Estatal SoledadES ya afectaba a un 13,4% de los españoles) y cómo influye en el sistema de cuidados actual, Plata destaca la importancia de anticiparse al futuro y utilizar todos los recursos posibles para paliar lo que puede ser una auténtica epidemia de aquí a unos años. Se refiere, en este caso, a la tecnología: dispositivos de control por voz -tipo Alexa-, pantallas inteligentes, sensores que alertan de algún comportamiento inusual de los usuarios… En Atende no solo no se quedan atrás, sino que están marcando la senda del futuro de los cuidados. Así lo han dejado patente en la edición de este año de Tecnosocial, el foro dedicado a la innovación y las nuevas tecnologías aplicadas a los Servicios Sociales donde la compañía ha puesto el foco precisamente en todas estas medidas para prevenir, detectar y actuar sobre casos de soledad no deseada. “Me apasiona estar al día y formar parte de estos nuevos proyectos que mejoran la calidad de vida de las personas usuarias del Servicio de Ayuda a Domicilio”, concluye Plata.
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