Powered by
y con él, la playa, el tiempo libre, las altas temperaturas… y, para mí, los problemas con el calzado. Desde que recuerdo, siempre he tenido unos pies muy delicados y con el calor, me es realmente difícil encontrar unos zapatos o sandalias cómodos para el verano. Si, como a mí, eso también te ocurre, sigue leyendo, porque he encontrado la solución perfecta con Yuccs.
f
en realidad, yo no…
Fue mi madre quien me habló de unas zapatillas que se había comprado junto a sus amigas y que le habían cambiado la vida, sobre todo cuando, tras estos meses sin salir mucho de casa, volvió a pasear con el buen tiempo.
Yo escuché su experiencia con escepticismo, porque esta no era la primera vez que me prometían un calzado milagroso. A mí, hasta las zapatillas deportivas me hacían heridas los primeros días o si les daba mucho uso y, en verano, con el calor, la situación empeoraba.
“Ya verás, pruébalas”, me dijo mi madre al teléfono. El envío gratuito, la promoción actual que tienen de hasta 20 euros de descuento y la posibilidad de devolverlas sin coste me convencieron para probarlas. Al cabo de unos días, llegaron a mi puerta.
Y el flechazo fue inmediato
Yo había escogido el modelo beige porque me parecía un color que podía combinar con todo y, cuando las saqué del paquete, me parecieron preciosas. Tanto que dudé de si, como me había dicho mi madre, iban a ser la solución perfecta para mí, porque estaba acostumbrada a que estética y funcionalidad no pudieran ir de la mano.
Así que me las probé con recelo y en seguida noté la diferencia.
por las nubes
Me parecieron lo más cómodo que había probado hasta entonces. No solo en cuanto a la pisada, cuya suela blanda de goma EVA da desde el primer momento una placentera sensación de estar flotando, sino también en la suavidad y flexibilidad del tejido, adaptándose perfectamente al pie sin rozaduras molestas, un punto crítico para una piel tan delicada como la mía.
Además, son tan ligeras que no llegan ni a pesar 300 gramos entre las dos. Esto, unido a la extrema comodidad de su tejido único de lana merina y a su diseño en forma de calcetín, da la sensación de llevar puesto una zapatilla de casa.
a las altas temperaturas
Aunque las sensaciones en casa fueron muy positivas, aún me quedaba lo más importante: comprobar el desempeño de estas nuevas zapatillas en la calle ¡y en pleno verano! El protagonismo se lo lleva el tejido único que ha desarrollado la marca a partir de la más fina Lana Merina y, aunque es muy agradable al tacto del pie, aún guardaba dudas sobre si un componente así sería transpirable.
Pronto obtuve la respuesta: ¡estas zapatillas están hechas a prueba de altas temperaturas! La Lana Merina aguanta con buenísima nota las altas temperaturas del verano y permite transpirar el pie, adaptándose 100 % a él. Además, las plantillas son extraíbles y naturales ya que están hechas a partir del aceite de las plantas de ricino y vienen forradas con el mismo tejido de lana merina, lo que garantiza que la piel esté siempre seca y, por tanto, la zapatilla libre de malos olores.
Esto último hace, además, que pueda usarla sin calcetín. ¡Y así queda genial con unos vaqueros!
y producto local
Para mí, el principal acierto de las zapatillas YUCCS es que utilizan materiales de primera calidad, gracias a que su producción tiene lugar aquí bajo unos estrictos controles. El diseño se realiza en Mallorca, el desarrollo del producto entre Albacete y Alicante y, por último, se fabrican en Elche, así que todo es, como digo, made in Spain.
Además, YUCCS está comprometida con un modelo de producción sostenible, dentro de la slow fashion, una creciente -y necesaria- filosofía de consumo responsable. Por eso, además de que su producción es nacional, sus proveedores son empresas éticas de ganadería extensiva con certificados que garantizan el buen trato animal.
Un proyecto de La Razón Content para